Magnus Carlsen número uno de la clasificación mundial de ajedrez

Ahora falta saber si, además de La ciudad de la alegría, se va a abrir la mano con otro proyecto en el que precisamente está implicado Dominique Lapierre: el rodaje de un documental sobre la Madre Teresa. Funcionarios indios adujeron ante Lapierre que la propia Madre Teresa no se mostraba muy entusiasmada ante la posibilidad de que las cámaras se acercaran a su labor. Pero, en cuanto Lapierre sugirió que moderaría ciertos aspectos del guión, los funcionarios confesaron que la película podría obtener vía libre. Dominique Lapierre, mano a mano con Larry Collins, escribió un «bestseller» sobre los tiempos de la independencia de la India, Esta noche la libertad, y siempre ha manifestado un gran interés por lo que sucede en el país.


Sin embargo, su enfoque al reflejar las condiciones de supervivencia de buena parte de la inmensa población de Calcuta en La ciudad de la alegría hizo que, al publicarse el libro, una asociación benéfica del barrio de Pilijana rechazase la oferta del autor de compartir los derechos, aduciendo que La ciudad de la alegría «glorificaba» la miseria. En los últimos meses los cineastas franceses parecen sumamente interesados en rodar en la India. El ejemplo más reciente es Nocturno indio, de Alain Corneau, realizador de una muestra del género negro como Policía Python: en su película «india», Corneau se basa en una novela del italiano Antonio Tabucchi, y apuesta por una atmósfera de misterio bien envuelta por los incomparables paisajes de la India.

Arrabal se sienta en el sofá y fuma un puro con ostentación. El fotógrafo le ha preguntado si le importa quitar «esa bola que hace sombras» y Arrabal ha contestado que «eso no es una bola, eso es una escultura muy buena». Enfrente, el expresionismo abstracto de Jackson Pollock cuelga de la pared, junto a otro cuadro de Dalí y una escultura de Otero, «el mejor escultor español». 

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